Satisfecha Miss Puerto Rico Universe con sus logros y enfocada en prepararse para el concurso en Brasil
Por Patricia Vargas Casiano / End.pvargas@elnuevodia.com
Con la noticia de que el certamen de Miss Universe se va a celebrar el día de su cumpleaños, 12 de septiembre, en Sao Paulo, Brasil, Viviana Ortiz está celebrando la Navidad por partida doble. Las ansias le han comenzado a ganar y la reina boricua está loca porque llegue enero para su preparación de cara a todas las emociones que le esperan en el nuevo año.
“No me esperaba que fuera Brasil. Nunca he ido. Lo único que sé es que se habla portugués. Estoy segura de que me va a ir muy bien y estoy bien emocionada porque voy a celebrar mi cumpleaños la noche final. He recibido muchos comentarios positivos de que la corona va a ser mi gran regalo. Puedo y espero ganar, o perder, pero lo importante es que tengo un buen presentimiento de que voy a vivir una experiencia linda e inolvidable”, declaró la modelo.
Hasta hace poco se comentaba que los países a celebrar el certamen podrían ser China, Vietnam, México o Las Vegas, pero ahora que sabe dónde competirá, Viviana le ha entrado un entusiasmo mayor. “Tengo los ánimos por los cielos para empezar a trabajar y ya quiero que sea enero, son muchas emociones juntas. Hasta mi familia y amigos se han contagiado y están buscando precios de pasajes para ir a Brasil”.
Por el momento, la recién elegida reina se ha tomado unas cortas vacaciones en su pueblo de Corozal para prepararse para todo lo que le espera en el año por venir, que no es fácil, pero sí entretenido y lleno de sorpresas. Además, ahora a sus clases de inglés y dicción, le tendrá que agregar las de portugués para comunicarse mejor con los brasileños.
“Estoy celebrando la Navidad con mucha alegría y mucha parranda, y ahora más. A pesar de sentir mucha tristeza en esta época por el vacío que dejó mi prima con su muerte hace diez años, siempre se canta y se baila. Asocio la alegría con parrandas, vacaciones, familia y hacer cosas que generalmente no haces”.
De pequeña, recuerda la reina de 23 años, que siempre celebraban las fiestas en la casa de la abuela en el pueblo pero a medida que pasan los años los padres de Viviana prefieren quedarse en la casa por miedo a las balas perdidas, pero ahora ella sale a recibir el año, como éste, en la casa de su familia de Bayamón.
Una Navidad ideal para Viviana es tener a Ednita Nazario en su casa llevando una parranda navideña y que le cante “Tú sabes bien”. Además, según la beldad, no puede faltar bailar un poco de salsa.
La reina rompió con el novio formal que tenía, pero mantienen una buena relación. “Hay muchas llamadas y mensajes en Facebook pero nada serio. Me han salido unas confesiones amorosas de pretendientes que jamás pensé”, sostuvo.
Lo fuerte de la comunicadora es la proyección escénica, así logró la corona que hoy ostenta.
El vestido que lleve la noche final en Brasil debe ser uno con el que ella pueda jugar y quitarse piezas como lo hizo cuando ganó el concurso local con el traje de José Karlo. Los posibles prospectos para confeccionarle su vestido son los diseñadores José Karlo, Gustavo Arango y Luis Antonio.
“Cada vez que me subo al escenario hago una presentación diferente, por eso practico mucho hasta sentirme segura. No porque haya ensayado quiere decir que lo voy a hacer bien esa noche. Me miro muchísimas veces al espejo para ver cómo sale y en el escenario hago contacto con el público. Todo se centra en quién eres y en lo que proyectas, una Viviana imponente que entretiene a las personas con los movimientos más dramáticos. La pasarela es una actuación, por eso me siento actriz sobre ella”.
Trabaja en su sonrisa
En enero, Viviana tendrá que prepararse muy bien físicamente con una fuerte rutina en el gimnasio. “Al ser latina tengo que cuidarme más, en especial las caderas”.
Mientras tanto, a la joven se le está trabajando la sonrisa con el doctor Mario Polo “para que cuando me ría no se vea ningún espacio”, dijo con coquetería.
La única cirugía que se vislumbra es la de la nariz, pues según Viviana, la tenedora de la franquicia local, Desirée Lowry, está tratando de mantener la naturalidad en ella.
Por Patricia Vargas Casiano / End.pvargas@elnuevodia.com
Con la noticia de que el certamen de Miss Universe se va a celebrar el día de su cumpleaños, 12 de septiembre, en Sao Paulo, Brasil, Viviana Ortiz está celebrando la Navidad por partida doble. Las ansias le han comenzado a ganar y la reina boricua está loca porque llegue enero para su preparación de cara a todas las emociones que le esperan en el nuevo año.
“No me esperaba que fuera Brasil. Nunca he ido. Lo único que sé es que se habla portugués. Estoy segura de que me va a ir muy bien y estoy bien emocionada porque voy a celebrar mi cumpleaños la noche final. He recibido muchos comentarios positivos de que la corona va a ser mi gran regalo. Puedo y espero ganar, o perder, pero lo importante es que tengo un buen presentimiento de que voy a vivir una experiencia linda e inolvidable”, declaró la modelo.
Hasta hace poco se comentaba que los países a celebrar el certamen podrían ser China, Vietnam, México o Las Vegas, pero ahora que sabe dónde competirá, Viviana le ha entrado un entusiasmo mayor. “Tengo los ánimos por los cielos para empezar a trabajar y ya quiero que sea enero, son muchas emociones juntas. Hasta mi familia y amigos se han contagiado y están buscando precios de pasajes para ir a Brasil”.
Por el momento, la recién elegida reina se ha tomado unas cortas vacaciones en su pueblo de Corozal para prepararse para todo lo que le espera en el año por venir, que no es fácil, pero sí entretenido y lleno de sorpresas. Además, ahora a sus clases de inglés y dicción, le tendrá que agregar las de portugués para comunicarse mejor con los brasileños.
“Estoy celebrando la Navidad con mucha alegría y mucha parranda, y ahora más. A pesar de sentir mucha tristeza en esta época por el vacío que dejó mi prima con su muerte hace diez años, siempre se canta y se baila. Asocio la alegría con parrandas, vacaciones, familia y hacer cosas que generalmente no haces”.
De pequeña, recuerda la reina de 23 años, que siempre celebraban las fiestas en la casa de la abuela en el pueblo pero a medida que pasan los años los padres de Viviana prefieren quedarse en la casa por miedo a las balas perdidas, pero ahora ella sale a recibir el año, como éste, en la casa de su familia de Bayamón.
Una Navidad ideal para Viviana es tener a Ednita Nazario en su casa llevando una parranda navideña y que le cante “Tú sabes bien”. Además, según la beldad, no puede faltar bailar un poco de salsa.
La reina rompió con el novio formal que tenía, pero mantienen una buena relación. “Hay muchas llamadas y mensajes en Facebook pero nada serio. Me han salido unas confesiones amorosas de pretendientes que jamás pensé”, sostuvo.
Lo fuerte de la comunicadora es la proyección escénica, así logró la corona que hoy ostenta.
El vestido que lleve la noche final en Brasil debe ser uno con el que ella pueda jugar y quitarse piezas como lo hizo cuando ganó el concurso local con el traje de José Karlo. Los posibles prospectos para confeccionarle su vestido son los diseñadores José Karlo, Gustavo Arango y Luis Antonio.
“Cada vez que me subo al escenario hago una presentación diferente, por eso practico mucho hasta sentirme segura. No porque haya ensayado quiere decir que lo voy a hacer bien esa noche. Me miro muchísimas veces al espejo para ver cómo sale y en el escenario hago contacto con el público. Todo se centra en quién eres y en lo que proyectas, una Viviana imponente que entretiene a las personas con los movimientos más dramáticos. La pasarela es una actuación, por eso me siento actriz sobre ella”.
Trabaja en su sonrisa
En enero, Viviana tendrá que prepararse muy bien físicamente con una fuerte rutina en el gimnasio. “Al ser latina tengo que cuidarme más, en especial las caderas”.
Mientras tanto, a la joven se le está trabajando la sonrisa con el doctor Mario Polo “para que cuando me ría no se vea ningún espacio”, dijo con coquetería.
La única cirugía que se vislumbra es la de la nariz, pues según Viviana, la tenedora de la franquicia local, Desirée Lowry, está tratando de mantener la naturalidad en ella.
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